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El presupuesto del Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda se incrementa un 7,2% y cuenta este año con 205,9 millones de euros

El Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda va a disponer en 2018 de un presupuesto de 205,9 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,2% sobre el gasto disponible en 2017. Se trata del Departamento que más crece en términos porcentuales de todo el Gobierno Vasco. 

La cantidad más importante en términos absolutos corresponde al área de Vivienda, con 126,9 millones de euros; una cuantía que asciende a 327,5 millones si se suman los presupuestos de sus sociedades públicas Alokabide y Visesa.

El área de Medio Ambiente, por su parte, va a gestionar 64,9 millones y la de Planificación Territorial, 7,9 millones.

PLANIFICACIÓN TERRITORIAL

Al programa de Ordenación del Territorio y Urbanismo se asigna un presupuesto de 7,9 millones de euros. Sus actuaciones se centran en tres ejes:

1.    La planificación territorial, con una dotación de 1,4 millones al servicio de los siguientes objetivos: la apuesta por un territorio equilibrado, cohesionado y sostenible y la puesta en valor del paisaje.

2.    El urbanismo y la regeneración urbana, con un presupuesto de 5 millones.

3.    La información geográfica territorial, que cuenta con 800.000 euros.

 

VIVIENDA

En lo que se refiere al área de Vivienda, el presupuesto del Departamento asciende a 126,98 millones de euros, lo que representa un incremento del 4% en relación a 2017. Pero, para determinar la capacidad presupuestaria de las políticas de gasto directo en materia de vivienda para este ejercicio, debemos incorporar al análisis los presupuestos de las sociedades públicas Visesa y Alokabide. Así, para 2018, Visesa dispone de un presupuesto de gastos de 122,7 millones de euros, y Alokabide de 77,8 millones de euros.
En conjunto, el presupuesto de gastos en vivienda, sumando el Departamento y sus sociedades públicas adscritas, se sitúa en 327,5 millones de euros.

De esta cifra total, el 62% es gasto directamente imputable a políticas de alquiler y el 26% es gasto imputable a políticas de rehabilitación urbana. Y descontando este último, el 84% del gasto directo del programa de vivienda se asigna a políticas de alquiler: es decir,  por encima de los términos fijados en la Ley de Vivienda. Concretamente, el 81% de la iniciativa de los entes públicos de vivienda se destinan al alquiler.

El programa de Vivienda se centra en tres objetivos:

1.    Desarrollar reglamentariamente la Ley de Vivienda y garantizar el Derecho Subjetivo a la Vivienda. Para satisfacer este derecho, en 2018 se adjudicarán viviendas en alquiler mediante la rotación del parque público gestionado por Alokabide,  las nuevas captaciones de Bizigune, la adjudicación de nuevas viviendas sociales y alojamientos dotacionales, y el pago de prestaciones económicas de vivienda (PEV).  Se estima en 2.500 el número de hogares que tendrán reconocido el DSV al cierre de ejercicio. La partida destinada a cubrir esas prestaciones económicas se ha dotado con una partida ampliable de 2 millones de euros.

2.    El impulso del alquiler, a través de la nueva edificación, la captación de viviendas deshabitadas y las ayudas directas al pago del alquiler. El objetivo para 2018 es alcanzar las 5.400 viviendas captadas por el programa Bizigune (la partida sube un 8%, hasta los 26 millones, y la renta máxima a abonar a los propietarios sube a 600 € desde los 525 actuales)  y otras 400 viviendas a través del programa  ASAP.

p>3.    Impulsar la rehabilitación del parque residencial. El próximo año casi 1 de cada 3 euros de gasto en vivienda se destinarán a políticas de rehabilitación urbana. Con ellas se pretende renovar nuestro envejecido parque de vivienda, mejorando la accesibilidad, sus condiciones de energéticas y de habitabilidad, y favoreciendo la integración social de las personas que viven en los barrios más degradados.
Se va a reforzar el impulso a las Inspecciones Técnicas de Edificios (ITEs), dando apoyo a los ayuntamientos en esta tarea, realizando un mayor esfuerzo en materia de accesibilidad. Así, el Plan Renove Rehabilitación concentrará todas las actuaciones en accesibilidad y rehabilitación urbana, con el objetivo de incidir, con efectos multiplicadores, en la actividad económica del sector y en el mantenimiento y creación de empleo vinculado a este nuevo nicho de mercado.

En 2018 contará con 21 millones de euros para ayudar a  propietarios y comunidades de vecinos en la rehabilitación de 15.000 viviendas. Para la mejora específica de la eficiencia energética de grupos de edificios se recogen 6,4 millones de euros, con el objetivo de alcanzar 1.322 viviendas. Otros 6,4 millones de euros irán destinados a financiar 140 nuevos proyectos que desarrollen los ayuntamientos en materia de accesibilidad y supresión de barreras arquitectónicas en espacios urbanos. Sestao Berri recibirá 1,9 millones euros para actuaciones de regeneración en Sestao. Y Visesa, 5,9 millones de euros, en gastos comprometidos hasta 2019, para la rehabilitación integral del barrio de Coronación de Vitoria-Gasteiz.

p>FUENTE: EUSKADI.EUS